
Aimcra analiza el comportamiento de diferentes variedades frente a la cercospora y el virus de la amarillez junto a semillista y genetistas
El equipo de AIMCRA continúa con sus ensayos e investigaciones en el norte con el objetivo de conseguir una remolacha azucarera más resistente a plagas y enfermedades y, por tanto, más sana y productiva, con la máxima rentabilidad.
De este modo, hace unos días, los técnicos de AIMCRA y de Azucarera han visitado los campos de ensayo de Zarratón, en La Rioja, de Roperuelos del Páramo y Moscas del Páramo, en la provincia de León, y de Horcajo de las Torres, en la provincia de Salamanca.
En esta visita, también han participado semillistas, genetistas, y personal de la oficina española de variedades vegetales del Ministerio de Agricultura, para constatar y analizar el comportamiento de las diferentes variedades sembradas en los campos de ensayo. “Lo que hacemos es comprobar cómo evoluciona cada variedad, ver las que mejor se adatan frente a la cercospora o el virus de la amarillez, sin penalizar en los parámetros de producción y de calidad de la remolacha”, explica la directora de AIMCRA, Elba Rosique.
De este modo, este año se han establecido cinco campos de ensayo en los que se analizan las variedades de primer y segundo año de registro, variedades recomendadas que se siembran durante 3 años seguidos para conseguir los mejores resultados, variedades Conviso y variedades resistentes a la cercospora y al virus de la amarillez.
Es muy interesante y esperanzador poder ver el material genético que estará disponible en las próximas siembras, dando mejores soluciones a los problemas actuales.